viernes, 30 de noviembre de 2007

HASTA SIEMPRE BICHO



Para Mauricio Nibaldo Álvarez Torrico, nuestro querido Bicho.

BICHO: TU EXPERIENCIA ES LA MEJOR LECCIÓN DE LA SOLIDARIDAD SOCIALISTA

Amigo Bicho, ayer supe que falleciste en un accidente de tránsito, ibas camino a Tocopilla, lo más seguro que para ayudar a alguien que necesitaba de tu ayuda.

La información la tomé con calma pero con mucha pena. Inmediatamente me acordé de ti y de nuestra larga conversación en tu casa en Antofagasta. Lugar que abriste de par en par para recibir al compañero visitante de Santiago, como tantas veces lo hiciste con muchos de nosotros. Como siempre, no tuviste ningún problema para cederme tu cama, optando por dormir doblado en el sillón de tu humilde hogar.

Esa noche, luego de trabajar todo el día, hablamos de cómo arreglaríamos el mundo, de los acabronados que son los viejos de nuestro partido, de las peleas idiotas de los lotes, de la falta de camaradería y de la permanente visión dogmática de uno y otro bando.

Con pasión me mostrabas los recortes de prensa que guardabas con orgullo por tu cruzada, para denunciar y terminar con la contaminación por plomo de la población donde vivías junto a tus padres. Quizás te escribo con la idiota esperanza que me contestes, quizás lo hago por que me cuesta mucho creer que estas muerto y que ya no nos alegrarás con tu mirada sencilla, concreta, consecuente, directa y alegre de la vida.

Pero también lo hago por que sé que tu vida es un ejemplo de coherencia, compromiso y consecuencia política. En cada uno de las personas que tuvimos el honor de conocerte, seguirá viva la llama de tu alegría, compasión y enseñanza de solidaridad socialista, la que se construye con los actos de entrega y solidaridad, muchas veces más anónimos, que los eternos discursos de grandilocuencia y megalomanía, que sobran dentro de la clase política.

Patricio